El autor: Omar Ojanama

jueves, 15 de julio de 2010

Las redes sociales y el evangelio


Aunque Daniel 12: 4 menciona que en el tiempo del fin la ciencia aumentará en cuanto al conocimiento de las profecías de la Biblia, también se ha aplicado dicho texto al avance vertiginoso de la tecnología en todas sus aplicaciones; y en esto, internet se ha convertido en el elemento principal de la vida diaria de todos los seres humanos civilizados.

Y es que internet ha pasado de ser una herramienta de mera búsqueda de información, para convertirse en la progenitora de "universos" y "sociedades" digitales que han llegado a transformar nuestra visión de la realidad y las relaciones interpersonales. Facebook, Hi5, MySpace, son elementos comunes a nues
tra humanidad que, si alguien aún no los ha experimentado, sería considerado como "anticuado" o "raro". Y qué decir del fenómeno Youtube, que en sólo seis años se ha convertido en el medio audiovisual digital por antonomasia en la vida digital de los seres humanos. Podemos subir (uploading, en el tecnicismo inglés del concepto) y descargar (downloading) automáticamente cualquier clase de video en el momento que queramos, con una rapidez que ahora a pocos asombra. Queramoslo o no, estos elementos virtuales forman parte de nuestra existencia.

Pero ¿qué relación puede tener esto con el evangelio y la gran comisión de Mateo 28:19? Pues bien, Cristo dejó a los discipulos la idea matriz de predicar el mensaje de salvación y sentó la base y el principio correcto para hacerlo. Pero los discípulos usaron los medios disponibles en su tiempo para efectuar esa tarea: las super-carreteras romanas eran una inmensa red de comunicación, transporte y movilización que permitían a cualquier ciudadano transportarse por el Imperio; gracias a este elemento, el evangelio pudo ser llevado a todo el mundo conocido. Otro elemento de aquel tiempo fueron las cartas, escritas en papiro o en materiales corrientes y que permitían una portabilidad adecuada y práctica. Las epístolas del NT constituyeron un soporte adecuado para la preservación del testimonio apostólico y la diseminación del mismo en las iglesias. Podemos decir que la iglesia primitiva usó la tecnología disponible en su tiempo para cumplir la comisión de Cristo.

Así ahora, en nuestro siglo XXI, podemos hacer uso de la teconología disponible para cumplir nuestra tarea de evangelización. Es una manera divertida y peculiar de entablar amistades y contactos para el reino celestial usando los soportes interactivos y ciberespaciales de moda. Debemos dar testimonio de lo que Cristo ha hecho por nosotros en nuestras vidas, y pedirle a Dios que nos ayude a tener maneras dinámicas y atractivas para compartir nuestra fe con el prójimo. Dios nos tomará cuenta de ello, aun del uso que podamos darle al Facebook o a nuestras cuentas sociales en el ciberespacio.